Seguro que si te pido que pienses en animales que sean de color rosa, los flamencos sean de los primeros que se te vengan a la mente. Pero, ¿y si te dijera que realmente no son rosados? Al menos, no de manera natural.
Por eso, es posible que alguna vez hayas visto ejemplares de flamencos blancos o grises, el tono con el que nacen sus plumas hasta que un proceso vinculado a su alimentación lo cambia todo…
Si quieres saber por qué los flamencos son de color rosa (o naranja), así como las diferentes especies que existen y los parques naturales en España donde puedes visitarlos… ¡Sigue leyendo!
¿Por qué los flamencos son de color rosa?
Una sustancia pigmentante llamada “carotenoide” es la responsable del color rosa de los flamencos. Quizás te suenen, ya que las zanahorias son ricas en carotenoides. Aunque no es en esta verdura en el que los flamencos la obtienen.
Las algas, los camarones de salmuera y otros pequeños invertebrados son algunos de los alimentos presentes en la dieta habitual de los flamencos. Entre las muchas vitaminas y nutrientes que les otorgan, destacan los carotenoides.
Cuando los flamencos digieren estos alimentos, sus cuerpos metabolizan el carotenoide y lo convierten en un colorante que se termina depositando en sus plumas y piel. A mayor ingesta de esta sustancia, más intenso será el color rosado o anaranjado.
Por lo que, si en su dieta no se incluyen alimentos de este tipo, entonces los flamencos no serán de color rosa. Además, cabe añadir, que suelen tardar varios años en adquirir la coloración definitiva y no en todas las especies se da de la misma manera.
Todos los flamencos no son iguales
Más allá del flamenco común o ‘Phoenicopterus roseus’, existen otras 5 especies de flamencos que difieren en ubicación, tamaño, plumaje y color. Así que, si pensabas que todos eran iguales, te presentamos a ‘chilensis’, ‘minor’, ‘andinus’ y ‘jamesi’.
Aunque, primero déjame contarte algunas curiosidades sobre el más estereotípico, el ‘roseus’: es el flamenco más grande y extendido en el mundo. Lo puedes encontrar en África, Asia y Europa, sobre todo, en la costa y los lagos salados. Se caracteriza por tener tanto las plumas como el pico de color rosa pálido. Además, ambas puntas suelen ser negras.
Ahora sí, vamos con los menos “habituales” del que ‘ruber’ es el más colorido. Conocido como el flamenco caribeño, tiene un tamaño similar al común, pero su plumaje es de un rosado muy intenso. Lo encontrarás en el Caribe, el norte de Sudamérica y la península de Yucatán.
De tamaño mediano y un plumaje de rosado claro es el ‘chilensis’. Es decir, el flamenco chileno quien, como te podrás imaginar, vive en esta región de Sudamérica. Como al resto, le gustan los lagos salados y alcalinos.
Continuamos con el más pequeño de los flamencos: ‘minor’. En este caso, su plumaje es blanco o rosado muy claro y su pico destaca por ser de color negro con la base roja. Lo puedes encontrar en la parte oriental y meridional de África, así como en zonas de Asia occidental.
Si ‘minor’, se caracterizaba por el curioso color de su pico, en el caso de ‘andinus’, el flamenco andino, te enamorará su pico amarillo con la punta negra. Aunque para verlo tendrás que viajar a los Andes.
Concluimos con ‘jamesi’, el vecino del flamenco andino que, en su caso, habita en los lagos salados más someros. También, es de los más excepcionales, pues su pico es naranja con la punta negra.
¿Y tú, sabías que existían hasta seis especies de flamencos diferentes? ¿Y que se distinguían más por el color de su pico que por el plumaje?
3 Parques Naturales en los que puedes ver flamencos en España
La ubicación estratégica de España hace que nuestro país sea un enclave muy especial para la observación de aves. A continuación, te dejamos 3 parques naturales en los que podrás ver flamencos:
Parque Natural de Ses Salines
En la turística isla de Ibiza, más allá de la fiesta, los pubs y los chiringuitos de playa, se encuentra el Parque Natural de Ses Salines: uno de los espacios donde se concentra el mayor número de aves acuáticas y, en especial de flamencos, en España.
Gracias a las algas y los crustáceos presentes en las salinas y lagos del parque, los flamencos de Ses Salines poseen un color rosa muy intenso. De hecho, es tal que se pueden ver con facilidad desde la carretera principal que va al parque, así como de los diferentes miradores que hay alrededor.
Parque Nacional de Doñana
Entre las provincias de Huelva, Sevilla y Cádiz se extiende el Parque Nacional de Doñana, uno de los humedales más importantes del mundo. A día de hoy, más de 230 aves habitan en este lugar. Uno de los principales motivos por los que prima la necesidad de protegerlo y conservarlo, aunque, a raíz de las malas praxis institucionales, su existencia corre un grave peligro.
De entre todas las especies que viven en el Parque Nacional de Doñana, el flamenco es una de las más abundantes. Por lo que si quieres ver cómo se desenvuelven en total libertad, te recomendamos visitarlo.
Además, existen diferentes rutas para poder hacerlo sin alterar su comportamiento ni poner en riesgo su seguridad (ni la tuya).
Reserva Natural de la Laguna de Fuente de Piedra
Al norte de Málaga, en la famosa comarca de Antequera, se encuentra la mayor colonia reproductora de flamencos de nuestro país. Declarado sitio Ramsar, Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) y Reserva Natural, la Laguna de Fuente de Piedra tiene un valor ecológico incalculable.
Cabe añadir que, con 1.400 hectáreas de extensión, es la laguna más grande de Andalucía. Por lo que, si vives cerca o planeas visitar Málaga próximamente, recuerda incluir este lugar en tu itinerario.
Además de los flamencos de color rosa, también se pueden divisar garzas reales, cigüeñas y aves rapaces en periodos invernales o de paso migratorio.
