Arranca la temporada 2017 con muchos cambios respecto a la anterior
Se apaga el semáforo para los amantes de los monoplazas. Tras cuatro meses vuelve la Fórmula 1 con más fuerza que nunca. Este fin de semana vuelve la adrenalina al asfalto del circuito urbano de Melbourne (Australia) dando comienzo a la temporada.
Mejoras en los monoplazas
Para este 2017 hay muchos cambios significativos en los monoplazas tanto por dentro como por fuera. Habrá una mayor igualdad en los motores V6 Turbo, y las escuderías lo notarán en el rendimiento que, se supone, será cercano a una diferencia por vuelta de un 2% respecto a años anteriores.
Los neumáticos que ha preparado Pirelli para este 2017 reflejarán una menor diferencia entre los distintos compuestos. Esto se debe a la intención de evitar el desgaste excesivo cuando el monoplaza está a estela de otro y a una degradación proporcional al rendimiento. Los nuevos neumáticos provocarán menos adelantamientos influenciados por el estado de los mismos y favorecerán los adelantamientos debido a la destreza técnica del propio piloto. Los nuevos neumáticos delanteros tendrán un aumento de 60 milímetros de anchura mientras que los traseros aumentarán en 80 milímetros.
Los cambios más drásticos los ha sufrido el chasis. Los nuevos monoplazas ganarán 310 centímetros de longitud y 20 centímetros de ancho. Los alerones también tendrán cambios; el delantero aumentará en 15 centímetros su anchura y tendrá una inclinación de 12’5º, mientras que el trasero perderá 15 centímetros de altura y ganará 20 de ancho además de una inclinación de 25º. El difusor se ampliará hasta un 70% con un aumento de las dimensiones en 175 milímetros de largo, 50 de ancho y 50 de alto. Todos estos cambios en el chasis de los vehículos provocará que la aerodinámica sea más importante, ganando en carga frontal y añadiéndole un plus a la carga aerodinámica trasera. También volverán las aletas de tiburón a la parrilla y cada escudería adaptará estas modificaciones según su propio criterio dentro de los límites marcados por la normativa.
20 gladiadores del asfalto
Este año serán veinte pilotos los que lucharán cada carrera por la mejor plaza. Esto se debe a que Manor Racing ha dejado el campeonato. A parte de eso, hay algunos cambios significativos en la parrilla. Comenzando por Mercedes – AMG que pierde al alemán Nico Rosberg, último campeón del mundo en la pasada campaña. Otros de los afectados han sido Williams Martini Racing y Force India. En el caso de la escudería británica, Felipe Massa vuelve al campeonato tras haber anunciado su retirada en el Gran Premio de Italia 2016 debido a la marcha de su ex compañero Valtteri Bottas a Mercerdes. Estará acompañado del joven canadiense de 18 años, Lance Stroll. Por su parte, Sahara Force India da la bienvenida al francés Esteban Ocon de 20 años y ex de Manor Racing.
Nuevos jefes, nuevas normas… y una carrera menos
El calendario será similar al del pasado año con dos únicas diferencias. No habrá Gran Premio de Alemania, reduciéndose a veinte el número de carreras a disputar. Habrá también un intercambio de fechas entre Bahrein y China, que pasará a ser la segunda prueba del año. El calendario se abre este fin de semana y cerrará el 26 de noviembre en el Gran Premio de los Emiratos Árabes Unidos.
En cuanto a reglamento de carrera, no variará nada a excepción de una norma: la salida tras Safety Car. Dicha norma provocaba el descuento de las vueltas de una carrera en las salidas tras el coche de seguridad en los casos de extrema precaución. La nueva normativa argumenta que, además de no descontarse las vueltas, cuando el director de carrera crea conveniente el comienzo se hará mediante una salida normal en parrilla.
Una novedad significativa en la F1 este año será la ausencia de Bernie Ecclestone como jefe supremo. Los nuevos mandatarios de Liberty Media son Sean Bratches encargado del puesto de director general, Chase Carey como nuevo jefe y Ross Brawn como director deportivo.
Romper/mantener la hegemonía de Mercedes como principal objetivo de las mejoras
Obviamente, la escudería favorita a la consecución del título es Mercedes, que ha logrado ganar los últimos tres mundiales, tanto de constructores como de pilotos (2 Hamilton y 1 Rosberg). Esta campaña intentará revalidar el título con el W08 EQ Power +, el primer Mercedes-AMG híbrido. La gran diferencia son los nuevos aletines, que recuerdan a los de 2008, junto a un S-Duct extremo en un morro muy similar al de la pasada temporada.
Red Bull es el aspirante al trono. Desbancado de la gloria durante los últimos años, la escudería suiza ha preparado un morro muy creativo con el que intentará rivalizar el título.
Por su parte, la escudería de Fernando Alonso, McLaren-Honda, vuelve al color naranja papaya de la época dorada de McLaren en los años 60. Unos cambios muy marcados respecto al año pasado entre los que incluye un alerón trasero con soportes mínimos y una aerodinámica muy elaborada. El asturiano afirmó que sería un sueño lograr el podio esta temporada, pero no desmiente que lucharán por estar lo más arriba posible.
Darío Ruiz