Si te preocupa la factura de la luz, el gas o ambas, la solución podría estar en el aislamiento térmico de tu vivienda. Si bien requiere de una inversión previa, actualmente hay varias líneas de subvenciones que ayudan a costearlo.
Y es que… ¿Sabías que cerca del 45% del gasto energético se corresponde a la climatización de las viviendas? Encender el aire acondicionado en verano o la calefacción en invierno es casi obligatorio en las edificaciones construidas antes de 1980 en España.
A partir de ese año, se comenzó a exigir la instalación de medidas de aislamiento en los edificios. No obstante, la realidad es que todavía una parte muy importante de las construcciones españolas no están correctamente acondicionadas.
“Un aislamiento térmico deficiente dispara el consumo de energía en climatización y puede suponer pagar hasta 1.000 euros más al año en energía. En España, se calcula que la mitad de las viviendas están mal aisladas”, alerta OCU en un comunicado.
Si quieres saber más sobre cómo aislar tu vivienda, los diferentes tipos de aislamientos térmicos que existen y cuáles son sus principales beneficios. ¡Sigue leyendo!
El aislamiento térmico: clave en el ahorro energético
Después de un año alcanzando continuos récords en la subida del precio de la luz y el gas, y en vistas de que la situación no mejorará a corto plazo, te recomendamos que analices o revises el aislamiento térmico de tu vivienda.
Pero, ¿qué significa este término? En palabras de la investigadora María Teresa Cuerdo Vilches:
“El aislamiento térmico es una capa que se pone normalmente en lo que se conoce como la envolvente del edificio, es decir, en todas las divisiones como la fachada, la cubierta y el forjado que están en contacto con personas […] Su función es disminuir la temperatura del cerramiento, de tal manera que hay una cara que está en contacto con el exterior y otra con el interior.”
Las medidas de aislamiento térmico generan un efecto similar a una cantimplora de acero inoxidable las cuales, en verano, nos ayudan a mantener el agua fresca aún estando bajo la exposición solar y, en invierno, evitan que la bebida pierda su calor rápidamente.
El certificado energético
¿Te gustaría saber cuál es el nivel de aislamiento térmico de tu vivienda? Si en los últimos años has comprado o vendido un inmueble seguro habrás escuchado hablar sobre “ el certificado energético”.
Se trata de un documento que califica tu casa con una letra, desde la A (la mejor) hasta la E (la peor) en función de su gasto energético. Es similar a las etiquetas de los electrodomésticos.
Según OCU, la diferencia entre una vivienda con una calificación A y E es significativa. Mientras que el consumo anual de la primera podría rondar los 1.360 kWh, en la segunda serían 11.884 kWh. Esto traducido a euros son un gasto extra aproximado de 974€.
¿Entiendes la importancia de tomar medidas para mejorar el aislamiento térmico de tu vivienda? Y no es solo cuestión de dinero, también hay muchos otros factores por los que es prioritario.
Los beneficios del aislamiento térmico
Como habrás podido deducir por el título de este artículo, el ahorro económico es uno de los principales beneficios del aislamiento térmico. Mil euros no es una cantidad menor. Pero más allá del aspecto económico, hay otras ventajas a considerar:
- Mejora la calidad de vida de los ocupantes y reduce enfermedades asociadas al frío, la humedad o los ácaros.
- Confort térmico con una temperatura ideal y estable.
- El ahorro energético, y por tanto, de recursos para producir esa energía.
- Mayor sostenibilidad de las edificaciones y del entorno en el que se ubican.
- Reducen la contaminación ambiental y del efecto invernadero.
Al fin y al cabo, ganamos todos.
Te recomendamos: Una casa sostenible, una casa pasiva
Cómo acometer una reforma para mejorar el aislamiento térmico
Dependiendo del presupuesto que dispongas existen diferentes opciones para acometer una reforma para mejorar el aislamiento térmico. También influirá el hecho de si vives en una vivienda particular independiente o en un edificio, pero vamos por partes.
Si vives en una vivienda independiente
Existen muchas formas de mejorar el aislamiento térmico. ¿Lo más básico? Instalar puertas y ventanas de PVC oscilobatientes y con un cristal grueso. También te recomendamos comprarla con persiana si te es posible. De esta forma puedes llegar a reducir tanto el ruido como hasta un 60% del consumo de calefacción.
Una vez cambiadas las ventanas vamos con el suelo. ¿Es de cerámica, barro o moqueta? Dile adiós y sustitúyelo por un suelo de tipo porcelánico, vinílico (PVC rígido) o laminado. Son más resistentes, requieren menos mantenimiento y responden mejor a los cambios de temperatura, sobre todo, si se acompañan con bases aislantes.
El siguiente paso requiere más inversión que los anteriores: el revestimiento de la fachada y las cubiertas. Es importante tener en cuenta si se trata de una casa de bloques de hormigón, ladrillo o madera pues existe un amplio abanico de opciones para cada una.
En líneas generales, lo más rápido y rentable (a largo plazo) es utilizar paneles (de tipo sándwich imitando a la teja para el techo) y placas de hormigón prefabricado. De este modo mejoraremos el aislamiento térmico-acústico y la resistencia a fuertes vientos, incendios o inundaciones. La empresa canaria, GlassyDur, cuenta con un catálogo muy amplio.
El revestimiento interior también es importante, sobre todo si no podemos costear el exterior. Para estos casos, utilizar paneles de pladur con lana de roca o poliuretano puede marcar una diferencia sustancial. Si bien es cierto que perderemos espacio, pues la estancias se verán reducidas unos 10 centímetros, ganamos en confort y aislamiento.
Por último, recuerda sellar cualquier grieta y tratar las humedades si las hubiera.
Si vives en un edificio…
Las reformas que puedes llevar a cabo para mejorar el aislamiento térmico de tu vivienda si vives en un edificio son muy similares a las anteriores. La única y gran diferencia estaría en el revestimiento de la fachada ya que su coste y realización debería asumirlo toda la comunidad de vecinos.
También pueden suponer un problema las ventanas, sobre todo, si existe un estilo pautado que debas seguir. No obstante, hoy existen numerosas empresas que proporcionan soluciones personalizadas.
Lo importante es tomar acciones cuanto antes si el aislamiento térmico de tu vivienda es deficiente o bajo. Es cuestión de sostenibilidad, responsabilidad, ahorro y salud.
Te puede interesar: Programa de ayudas para la rehabilitación integral de edificios residenciales y viviendas
¿Y tú, te has planteado acometer este tipo de reformas? Te leemos en comentarios.
Devo López
