La construcción de casas prefabricadas en España crece a buen ritmo. Las ventajas que ofrece este modelo respecto al tradicional son especialmente atractivas para aquellas personas que quieran una vivienda económica, rápida y sostenible.

Gracias al desarrollo de nuevos materiales, así como soluciones constructivas y decorativas más innovadoras y pasivas, conseguir la casa de tus sueños no te llevará toda la vida. De hecho, dependiendo del diseño y la dimensión puede estar lista en cuestión de semanas.

¿Quieres saber más sobre las casas prefabricadas en España? En el siguiente artículo te contamos cómo funcionan, cuáles son los mejores materiales prefabricados, los costes asociados, las ventajas con respecto al modelo tradicional y el coste aproximado de una vivienda familiar prefabricada.

Casas prefabricadas: paneles vs modulares

Existen dos tipos de casas prefabricadas: paneles y modulares. Ambos tienen que ver con su sistema constructivo pues, si bien las casas prefabricadas siempre se realizan desde fábrica, no todas salen de esta del mismo modo.

Las casas prefabricadas por paneles básicamente es construir las paredes, techos y suelos de la vivienda por piezas que luego son transportadas para su ensamblaje en el terreno. Como si se tratase de un castillo de naipes sumamente resistente.

En el caso de las viviendas modulares, desde fábrica se lleva a cabo el 95% de la construcción de la casa a través de un sistema de módulos. Es por ello que el transporte es más tedioso y costoso pues la estamos llevando prácticamente terminadas para, una vez en el terreno, solo tener que fijarlos módulo y unirlos.

De hecho estaría lista para vivir si no fuera porque faltaría la instalación de los sanitarios, la luz y el mobiliario.

4 Tipos de Casas Prefabricadas

En España ya contamos con un amplio abanico de materiales para construir una casa prefabricada. La madera, el acero galvanizado, el hormigón prefabricado o los contenedores son los más estandarizados.

A continuación, te contamos un poco más sobre las características de cada uno de estos 4 tipos de casas prefabricadas.

Casas Prefabricadas de Madera

Las casas prefabricadas de madera son una de las opciones más sostenibles, económicas y rápidas que existen en la actualidad. 

Proyecto Norges Hus.

Aunque a menudo tendemos a pensar que una casa de madera es como vivir en una cabaña en el bosque, lo cierto es que podemos conseguir un resultado moderno y minimalista. ¡Y sino fíjate en las casas en Estados Unidos!

La clave está en revestir tu casa de madera con pladur. Con este sistema de paneles prefabricados dotarás a la vivienda de un mayor aislamiento térmico y acústico, protegerás la madera, ocultarás el cableado y, por supuesto, ¡tendrás paredes lisas y blancas!

Además, en la mayoría de los casos, las casas de madera se pueden ampliar o modificar fácilmente. Todo ello sin asumir costes excesivos, y es que, en líneas generales, el precio de una casa prefabricada de madera de 90m2 en España ronda los 40 mil euros. 

Casas Prefabricadas de Steel Frame

Imagina sustituir el ladrillo o los clásicos bloques de cemento por acero galvanizado, así son las casas prefabricadas de Steel Frame. Un sistema resistente y duradero que te permitirá construir el hogar de tus sueños a medida.

Este entramado de vigas de acero es ocho veces más ligero y flexible que una vivienda tradicional. Lo cual lo convierte en un material de construcción idóneo para lugares donde los terremotos son frecuentes.

Una vez armado, se reviste con paneles de madera u hormigón, así como diferentes tipos de aislantes para conseguir una vivienda hermética, eficiente y segura.

El coste de una vivienda Steel Frame depende del tamaño de la misma, si se quiere solo una planta o varias, el tipo de revestimiento, etc. No obstante, es sustancialmente menor que sus equivalentes tradicionales. 

Casas Prefabricadas Tipo Contenedor

A priori, las casas prefabricadas modulares tipo contenedor posiblemente sean las menos atractivas. Si bien, junto con las de madera son las más rápidas y económicas.

Dependiendo del número de estancias que desees deberás comprar X número de contenedores y, una vez dispongas de ellos, solo deberás cortar para abrir ventanas y puertas, levantar paredes divisorias y revestir su interior y exterior. 

Proyecto BoxHouse

Como son apilables podemos conseguir una vivienda de dos o más plantas sin problemas. El resultado final te sorprenderá. En España ya existen muchas casas prefabricadas de tipo contenedor. ¡Incluso hoteles de lujo! 

¿El presupuesto? Dependiendo del precio del contenedor puede variar mucho, pero en nuestro país ya hay empresas que construyen este tipo de casas por 50 mil euros. 

Casas Prefabricadas de Hormigón

Son las más resistentes. Dependiendo de las propiedades y aditivos del material, estamos ante viviendas que pueden soportar climas adversos, huracanes, incendios o la acción erosiva del mar. 

A diferencia de las anteriores, las de hormigón ya traen integrado el aislante con un sistema conocido como «sándwich». Por lo tanto, una vez ensamblados los paneles solo hay que instalar los suministros, el resto viene de fábrica. 

Te interesará saber que tener una casa de hormigón no significa vivir entre paredes grises ya que hoy es posible «pintar» el hormigón. Además, por la moldeabilidad de este material, también podemos conseguir diseños imposibles. 

Proyecto In Haus

En este caso, el presupuesto es mayor que los otros tipos pudiendo llegar a los 250 mil euros. No obstante, esta inversión se ve recompensada en su alta resistencia, su excelente eficiencia energética y nulo mantenimiento. 

3 Principales Ventajas de las Casas Prefabricadas

Las casas prefabricadas han revolucionado el sector de la construcción y, por consiguiente, el mercado inmobiliario en nuestro país. Especialmente en un momento en el que el coste de vida se dispara y la estabilidad económica flaquea. 

Las ventajas de comprar una vivienda prefabricada en España cada vez son mayores. A continuación, repasamos las tres principales que debes de tener en cuenta si estás pensando en adquirir tu primera casa.

Tú decides cuánto quieres gastarte, sin sorpresas.

La primera gran ventaja de las casas prefabricadas es que el presupuesto o el coste lo marcas tú. Dependiendo de tus necesidades y posibilidades, existe un amplio abanico de opciones. Olvídate de tener que pedir una hipoteca a 30 años.

Si dispones de un bajo presupuesto, pero ya cuentas con un solar, las casas de madera prefabricadas son tu mejor opción. Puedes empezar con un módulo de unos 45m2 por unos 15-20 mil euros.

Mientras que si tienes un presupuesto más flexible, te recomendamos las casas de hormigón prefabricado. Eso sí, elijas lo que elijas, ten la seguridad de que no habrá sorpresas finales. Antes de acometer cualquier proyecto se firma y cierra un presupuesto.

Reducirás el gasto en la factura de la luz

¿Y si tu propia casa pudiera ayudarte a reducir la factura de la luz? Con las viviendas prefabricadas, ¡es posible! De hecho, el principal problema de las construcciones tradicionales es que no se ha tenido en cuenta la eficiencia energética.

Ahora es obligatorio que todas las construcciones cuenten con un certificado de este tipo. Te interesará saber que las prefabricadas, dependiendo del material, suelen alcanzar entre un A y A+++.

Por lo tanto estamos ante viviendas pasivas, respetuosas con el medioambiente y con el consumo de recursos. Además, también puedes instalar cubiertas ajardinadas, placas solares, sistema de aerotermia, entre otros. Todo ello reducirá tu factura y aumentará tu calidad de vida.

Vivirás en tu nueva casa en menos de seis meses

Sin duda la ventaja que más nos cautiva, el no morir en el intento ni en la espera. Y es que, dependiendo del tipo de vivienda prefabricada, los plazos de entrega oscilan entre los 15 días y los 6 meses.

Un timing que resulta imposible con el método tradicional, pero que gracias a la construcción industrializada es posible. Atrás quedan los contratiempos, cuando la edificación se realiza desde fábrica rara vez hay errores o retrasos.

Así que sí, vivirás en tu nueva casa en menos de seis meses. ¿Acaso se puede pedir más?

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Devo López