Al sureste de la isla de Tenerife, se encuentra una localidad cuya historia y valor patrimonial y arquitectónico conquista a turistas y locales: la Villa de Candelaria. Un municipio pesquero con más de treinta mil habitantes que, durante todo el año, se convierte en un punto de peregrinaje.

Custodiada por el inmenso Océano Atlántico que acaricia sus costas y bajo la atenta mirada de sus elevadas montañas, Candelaria es siempre una parada imprescindible si visitas Tenerife. 

Gracias a su agradable clima, puedes disfrutar de un maravilloso día recorriendo sus calles y saboreando la exquisita gastronomía local. Si todavía no la conoces, ponte cómodo porque este viaje en el tiempo está a punto de despegar. ¡Empezamos!

Todo comenzó en el siglo XIV 

Un siglo antes de que se produjera uno de los mayores acontecimientos históricos de Canarias, la Conquista, tuvo lugar otro aún más simbólico y especial para sus antiguos pobladores: la aparición de “la morenita”, la Virgen de Candelaria.

Según recogen los historiadores, en el siglo XIV, los guanches fueron testigos de cómo en las orillas del valle de Güimar aparecía una imagen de la Virgen de Candelaria. Chaxiraxi, como la llamaban ellos, se convirtió en el centro de sus rezos y cultos religiosos.

A partir del año 1526, Pedro Fernández de Lugo mandó a construir un santuario para salvaguardar y conservar ahí la imagen de la virgen. Sin embargo, desafortunadamente, una tormenta dos siglos más tarde la hizo desaparecer.

La consternación que supuso esta gran pérdida para los habitantes que venían a visitarla desde cualquier rincón de la isla, impulsó al artista tinerfeño Fernando Estévez a realizar una réplica de la morenita. 

La misma que a día de hoy se encuentra en la basílica, diseñada por el arquitecto Enrique Marrero Regalado, inaugurada en 1959 a petición del obispo Domingo Pérez Cáceres. Con un estilo regionalista, esta obra arquitectónica es una de las más emblemáticas de Canarias.

De peregrinación 

Si tienes pensado visitar Tenerife en los meses de verano, te interesará saber que el 15 de agosto tiene lugar una de sus fiestas tradicionales más importantes en honor a la Virgen de Candelaria. A pesar de que el día oficial de la morenita es el 2 de febrero, en agosto se celebra su aparición.

Entre los acontecimientos más emotivos de estas fiestas destacamos la peregrinación hasta la Basílica de la Patrona de Canarias. El Camino Viejo de Candelaria declarado Bien de Interés Cultural y por el que transitan devotos provenientes desde casi cualquier rincón de la isla. 

Durante esos días, se realizan numerosas ofrendas, bailes tradicionales, degustaciones gastronómicas y se recorre la plaza de la Patrona de Canarias con la imagen mientras se representa su hallazgo. Días de gran fervor que no deja a nadie indiferente y que nos permite comprender mejor la historia de Canarias.

6 Imprescindibles 

Por su importancia histórica así como por la riquísima oferta gastronómica que nos ofrece, visitar la Villa de Candelaria es obligatorio. 

Especialmente, te recomendamos hacerlo desde por la mañana para que recorras sus calles con calma, disfrutes de un baño en cualquiera de sus playas y almuerces en alguno de sus muchos restaurantes a pie de playa.

Para ayudarte en tu itinerario te detallamos cuáles son los 6 imprescindibles que debes visitar:

  • Basílica de la Virgen de Candelaria
  • Plaza de la Patrona de Canarias
  • Centro alfarero ‘Casa de las Miquelas’
  • Convento de los Padres Dominicos
  • Cueva de Achbinico
  • Iglesia de Santa Ana

En la plaza encontrarás 9 figuras que representan a los menceyes guanches; la Cueva de Achbinico o de San Blas que fue el primer lugar donde se guardó la imagen de la virgen y el Convento de los Padres Dominicos, en el que habitan los religiosos que desde 1530 son los responsables de velar por ella.

Qué ver en Candelaria, Tenerife

Más allá de la arena y el mar: 3 rutas y senderos

¿Sabías que Candelaria se extiende más allá de su casco histórico? De hecho, si dispones de tiempo, hay múltiples rutas y senderos que conectan esta localidad con otros municipios de la isla. En particular, hay tres que destacan por su inesperada belleza fruto del contraste presente en sus paisajes.

Por un lado, el sendero de La Mesa (dificultad baja) con vistas al valle de Güímar. Por otro, el sendero Lomo El Centeno (dificultad media) que concluye en el Espacio Natural Protegido de Las Lagunetas. Y por último, la ruta de Los Brezos (dificultad media-alta) que recorre el Parque Natural de la Corona Forestal. 

¿Te gustaría conocer más sobre los rincones de Candelaria? Ven y visítala, la calidez de su clima y de sus gentes te terminarán de cautivar.

Devo López